El diplomático del país norteamericano, según ha informado hoy martes la cadena hebreo Canal 10, mostró su preocupación en una reunión que mantuvo en la ciudad palestina de Al-Quds (Jerusalén) con los líderes de las organizaciones judías estadounidenses.
En los últimos años un número significativo de fuerzas militares del régimen sionista tiene tendencias nacional-religiosas y la mayoría de ellos reside en los asentamientos judíos construidos en la Cisjordania ocupada, subrayó.
Friedman confirmó que ellos cuentan con una visión muy radical sobre el conflicto con los palestinos, pues aseguran que “Dios les entregó a los judíos la Tierra de Israel”.
El embajador estadounidense mencionó también la decisión de Washington de trasladar su embajada en los territorios palestinos ocupados de Tel Aviv a Al-Quds y enfatizó que dicha medida va a ponerse en práctica en 2019.
El presidente de EE.UU., Donald Trump, reconoció la ciudad palestina de Al-Quds como capital del régimen israelí. Tal decisión, que favorece al régimen de Israel, no solo ha provocado la ira palestina, sino que ha recibido la condena de casi todos los países árabes e incluso de los aliados de Washington.
En los últimos meses, el régimen de Tel Aviv ha intensificado sus actividades de construcción de asentamientos en los territorios palestinos ocupados, en flagrante violación del derecho internacional y desafiando la resolución 2334 del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (CSNU), que rechaza cualquier construcción en territorios ocupados.
Unos 570 000 colonos israelíes viven en 120 asentamientos ilegales construidos en los territorios palestinos. La comunidad internacional considera “ilegales” estos asentamientos y repudia las políticas expansionistas de Israel.
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