El jueves, el parlamento del régimen israelí aprobó la construcción de la primera colonia en casi dos décadas en la ocupada Cisjordania, decisión que ha sido condenada por los responsables palestinos, las Naciones Unidas y los principales países europeos.
Las críticas han llegado incluso desde Washington, donde la Administración estadounidense advirtió este viernes de que la expansión "sin restricciones" de las colonias israelíes pone trabas en el camino a una solución al conflicto entre palestinos e israelíes.
El nuevo plan israelí de construir asentamientos en Cisjordania "ha demostrado con claridad que Israel no es un verdadero socio para lograr la paz y está cautivo en las manos de colonos radicales", ha dicho el secretario general de la Liga Árabe, Ahmad Abulgueit
Por su parte, el secretario general de la Liga Árabe, Ahmad Abulgueit, condenó a últimas horas del viernes el plan israelí diciendo que la medida "ha demostrado con claridad que Israel no es un verdadero socio para lograr la paz y está cautivo en las manos de colonos radicales".
Abulgueit, exministro egipcio de Exteriores, advirtió de que el primer ministro israelí, Benyamin Netanyahu, "pretende envenenar la atmósfera para evitar la puesta en marcha de un proceso político sobre la base de una solución de dos Estados".
El nuevo plan israelí, dijo el diplomático, muestra que Israel sigue haciendo caso omiso a los llamados internacionales a que cese su campaña de construcción de asentamientos en los territorios palestinos ocupados desde 1967.
Israel continúa destruyendo las perspectivas de paz en nuestra región, y afectando gravemente nuestras vidas por el robo de tierras y recursos naturales y por la fragmentación de nuestro país", alertó el secretario general de Organización para la Liberación de Palestina (OLP), Saeb Erekat.
Dos días antes, los líderes de la LA habían exigido en la declaración final de su 28ª cumbre anual, celebrada en Jordania, la retirada de Israel de esos territorios y la formación de un Estado palestino independiente en las fronteras de 1967 como única manera de lograr la paz.
Altos funcionarios palestinos, entre ellos el secretario general de Organización para la Liberación de Palestina (OLP), Saeb Erekat, han repudiado también el polémico plan israelí.
"Israel continúa destruyendo las perspectivas de paz en nuestra región y afectando gravemente a nuestras vidas con el robo de tierras y recursos naturales y con la fragmentación de nuestro país", alertó Erekat.
Esta conducta israelí pone en entredicho la autoridad del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU), cuyos miembros instaron en diciembre pasado al régimen israelí mediante una resolución a cesar de inmediato y por completo la construcción de todo asentamiento en los territorios palestinos ocupados desde 1967.
ftm/mla/msf