“El arbitraje emitido en julio, que es obligatorio, ayuda a clarificar los derechos marítimos en la región”, enfatizó Obama en su intervención del miércoles en la cumbre de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN, por sus siglas en inglés), celebrada en Vientiane, capital de Laos.
El mandatario estadounidense insistió que su Gobierno seguiría trabajando con este bloque asiático para garantizar una resolución pacífica de las disputas sin olvidar la decisión de la Corte de La Haya.
El arbitraje emitido en julio, que es obligatorio, ayuda a clarificar los derechos marítimos en la región”, enfatizó el presidente de EE.UU., Barack Obama, en su intervención del miércoles en la cumbre de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN), celebrada en Vientiane, capital de Laos.
A este respecto, reconoció que “esto causa un aumento de la tensión pero espero que podamos discutir la manera de reducir estas tensiones con la promoción de la diplomacia y la estabilidad”.
Luego de subrayar el derecho estadounidense a la libre navegación aérea y marítima en el mar de la China Meridional, el jefe del Gobierno de Washington insistió en que naves de su país “continuarán sobrevolando y navegando” en la zona.
Estas afirmaciones de Obama tuvieron lugar después de que el premier chino, Li Keqiang, rechazara en su discurso ofrecido en la misma cumbre la intervención foránea, y en concreto la injerencia de EE.UU., en la solución de las disputas regionales.
El pasado mes de julio, la Corte de la Haya dio la razón a Manila y desestimó los derechos históricos que China reclama en esa zona. No obstante, Pekín rechazó fuertemente el fallo presentando un libro blanco con 150 argumentos para explicar su postura ante los conflictos territoriales que mantiene en esas aguas.
China, Filipinas, Vietnam, Taiwán, Brunéi y Malasia se disputan la soberanía de una parte del mar de la China Meridional con posibles reservas de petróleo y con grandes caladeros de pesca.
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