El enviado del papa Francisco, que está de momento en Santiago (capital chilena) para escuchar las denuncias contra el obispo Juan Barros, acusado de encubrir casos de pedofilia del sacerdote Fernando Karadima, se ha reunido este martes con un grupo de víctimas de abusos sexuales cometidos, supuestamente, por miembros de la Congregación de los Hermanos Maristas en Chile.
“Queremos que se cree una comisión especial vaticana, que analice, estudie, investigue y sancione todas las acciones cometidas por hermanos y religiosos (...) maristas”, ha demandado Isaac Givovich, portavoz de un grupo de víctimas de la citada congregación chilena.
Durante la cita, las víctimas han denunciado los presuntos abusos cometidos por maristas en Chile y han emitido declaraciones en una investigación canónica reciente de la congregación, aunque admiten que el proceso carece de garantías de transparencia.
Queremos que se cree una comisión especial vaticana, que analice, estudie, investigue y sancione todas las acciones cometidas por hermanos y religiosos (...) maristas”, ha demandado Isaac Givovich, portavoz de un grupo de víctimas de la Congregación de los Hermanos Maristas en Chile.
Scicluna, que es arzobispo de Malta, también tiene planeado reunirse esta misma jornada con otras víctimas que denuncian abusos sexuales llevados a cabo por miembros de la Congregación Salesiana en el país.
Estas investigaciones se remontan al viaje del papa Francisco a Chile el mes pasado, cuando le recibió una ola de manifestaciones contra los abusos sexuales perpetrados por los sacerdotes.
Durante la estadía del sumo pontífice en Chile, además de las masivas protestas, seis iglesias fueron atacadas. De igual modo, el propio cabeza de la Iglesia católica fue objeto de amenazas, una de las cuales decía que la próxima bomba estallaría en su sotana.
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