En un mensaje emitido este sábado en su cuenta en la red social Twitter, Morales ha arremetido contra Washington, tachando de “gran ofensa” las nuevas sanciones de EE.UU. contra Venezuela, anunciadas el jueves por el Tesoro estadounidense.
“Sancionar a las autoridades que administraron elecciones democráticas en Venezuela es grave ofensa contra la voluntad del pueblo venezolano”, denuncia el jefe de Estado boliviano.
De igual manera, ha enfatizado que, de hecho, este tipo de medidas demuestran la incapacidad de Estados Unidos, que “fracasó en su intento golpista e intervencionista. Latinoamérica ya no es colonia yanqui”, insiste.
Sancionar a las autoridades que administraron elecciones democráticas en Venezuela es grave ofensa contra la voluntad del pueblo venezolano (...) Latinoamérica ya no es colonia yanqui”, denuncia el presidente boliviano, Evo Morales.
Sancionar a las autoridades que administraron elecciones democráticas en Venezuela es grave ofensa contra la voluntad del pueblo venezolano y demuestra la impotencia del imperio que fracasó en su intento golpista e intervencionista. Latinoamérica ya no es colonia yanqui.
— Evo Morales Ayma (@evoespueblo) November 11, 2017
En otro tuit, el mandatario de Bolivia ha precisado que Washington impone sanciones “unilaterales” contra Caracas ya que, precisa, la oposición venezolana sufrió una derrota en las elecciones regionales de octubre: el oficialismo obtuvo una contundente victoria al conseguir 17 de los 23 estados.
A continuación, denuncia que con estas sanciones Washington atenta contra los derechos humanos, políticos y económicos del país bolivariano. “Es una agresión contra Venezuela, la democracia y América Latina”, aduce.
El Departamento del Tesoro de EE.UU. anunció que había incluido a otros 10 venezolanos en su lista negra, entre ellos, ministros y miembros de la cúpula oficialista. Esta medida, según Caracas, indica el exitoso proceso popular en Venezuela.
La Administración de EE.UU., dirigida por Donald Trump, trata de poner sobre las cuerdas a Caracas. Hasta ahora ha incluido a una treintena de funcionarios en la lista negra de Washington, también al presidente Nicolás Maduro. Sin embargo, entre las diversas medidas punitivas, destaca la adoptada el 25 de agosto, cuando se prohibió a ciudadanos y empresas estadounidenses operar nuevos bonos soberanos y de la estatal petrolera PDVSA.
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