La tragedia sucedió cuando los terroristas atacaron en la madrugada del miércoles distintas partes de la provincia tomando como rehenes a una treintena de lugareños, en su mayoría pastores.
El secuestro se produjo en represalia por la muerte de un comandante de la banda extremista por las fuerzas de seguridad durante una operación que llevaron a cabo el martes en la zona.
“Esta mañana varias personas de la región encontraron sus cuerpos (de los secuestrados)”, ha dicho el gobernador Nazir Jazeh.
El EIIL, asentado principalmente en Irak y Siria, ha ampliado su radio de acción en Afganistán y recientemente se ha unido a los extremistas de Talibán con miras a luchar contra las fuerzas de Afganistán en el este del país asiático.
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