En un contacto telefónico mantenido este miércoles con el primer ministro de Irak, Haidar al-Abadi, la parte estadounidense ha reconocido que el “envío de fuerzas turcas al norte de Irak se realizó sin el consentimiento previo del Gobierno iraquí” y ha exigido su salida inmediata del país árabe.
El envío de fuerzas turcas al norte de Irak se realizó sin el consentimiento previo del Gobierno iraquí”, reconoce el vicepresidente estadounidense, Joe Biden.
Por medio de un comunicado, la Casa Blanca indica que “ambos líderes se mostraron conformes con los datos preliminares sobre la retirada de algunas de las fuerzas turcas y llegaron al acuerdo de que eso debería continuar. Reiteraron que cualquier fuerza puede estar presente en Irak en coordinación y con el permiso del Gobierno iraquí”.
De igual manera, agrega la nota, Biden ha subrayado el apoyo a la soberanía y la integridad territorial de Irak, y ha solicitado a Turquía hacer lo mismo y evitar adoptar tales medidas sin el consentimiento del Gobierno de Bagdad.
El vicepresidente de Estados Unidos también instó a los líderes de ambos países a dar inicio a diálogos bilaterales “para hacer frente a cualquier queja pendiente bajo el espíritu de la mutua cooperación”.
El pasado 4 de diciembre, Turquía desplegó cientos de soldados en las proximidades de la ciudad de Mosul (norte de Irak), alegando que estaba luchando contra el grupo takfirí EIIL (Daesh, en árabe) y entrenando a las fuerzas iraquíes, algo que Bagdad negó.
El pasado viernes, Irak denunció a Turquía ante el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU) por su despliegue de tropas en su suelo. Además, el premier iraquí pidió a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) que presionase a Turquía para que retire sus tropas de Irak.
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