“Para Estados Unidos, la guerra en Yemen es un producto comercial para ganar dinero y activar su acuerdo del siglo”, ha indicado el portavoz del movimiento popular yemení Ansarolá, Muhamad Abdel Salam, en su cuenta oficial de Twitter.
Según los funcionarios yemeníes, Arabia Saudí y varios de sus aliados regionales están implicados en el llamado “acuerdo del siglo” —un controvertido plan de paz impulsado por EE.UU. que pretende obligar a los palestinos y otros pueblos de la región a reconocer al régimen de israel—, sin que este último de nada a cambio.
Al referirse a su reciente reunión con el enviado especial de las Naciones Unidas para Yemen, Martin Griffiths, Abdel Salam ha resaltado que este organismo ya no es capaz de enfrentarse a las tramas de Arabia Saudí y Estados Unidos para prolongar la guerra contra el país más pobre del mundo árabe.
“Un proceso de paz fallido, restricciones económicas, una crisis humanitaria creciente, prisioneros y detenidos, y una ONU incapaz de hacer nada debido al pleno apoyo estadounidense a la agresión y el asedio contra Yemen”, ha lamentado.
Para Estados Unidos, la guerra en Yemen es un producto comercial para ganar dinero y activar su acuerdo del siglo”, ha indicado el portavoz de Ansarolá, Muhamad Abdel Salam.
Las autoridades yemeníes han manifestado en reiteradas ocasiones que la agresión de Arabia Saudí y sus aliados regionales, iniciada en marzo de 2015, cuenta con el respaldo de EE.UU. y el régimen de Israel.
Los apoyos logístico y armamentístico de EE.UU. a Arabia Saudí han sido muy criticados a nivel internacional, ya que Riad lidera una guerra que ha sumido a los yemeníes en una situación catastrófica.
La comunidad internacional, sobre todo la Organización de las Naciones Unidas (ONU), ha llamado una y otra vez al régimen de los Al Saud a poner fin, de una vez por todas, a esa “estúpida guerra”, que ha dejado más de 11 000 muertos y cerca de 23 000 heridos, de acuerdo con el último balance ofrecido por el Ministerio de Sanidad de Yemen.
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