“Si queremos defender la libertad de manifestación (…), tendremos que desarrollar nuestras leyes y completar nuestra legislación. No podemos aceptar que haya personas que se aprovechen de estas manifestaciones para romper, quemar (…). Vienen a romper, a saquear, a desafiar a las instituciones”, ha dicho este lunes el primer ministro francés, Edouard Philippe, en alusión a las manifestaciones de los llamados “chalecos amarillos”.
En específico, el dignatario ha asegurado que se endurecerán las penas para delitos de vandalismo y para las protestas no declaradas, esta última siendo una práctica habitual de los chalecos amarillos, y ha adelantado que la Policía francesa reforzará su despliegue en los próximos días.
El movimiento de los chalecos amarillos surgió en noviembre pasado para oponerse a una subida del precio de los combustibles, pero después defendió un abanico más amplio de causas, en relación por ejemplo con los impuestos y con el derecho a un referendo de iniciativa ciudadana.
Desde el inicio del movimiento, ha habido más de 1500 heridos y miles de detenidos. Han muerto también diez personas, principalmente en accidentes ocurridos en bloqueos de carreteras.
Si queremos defender la libertad de manifestación (…), tendremos que desarrollar nuestras leyes y completar nuestra legislación. No podemos aceptar que haya personas que se aprovechen de estas manifestaciones para romper, quemar (…). Vienen a romper, a saquear, a desafiar a las instituciones”, dice el primer ministro francés, Edouard Philippe, en alusión a las manifestaciones de los chalecos amarillos.
hgn/mla/fdd/hnb
