El acto de apertura del complejo castrense, bautizado como “Mohammed Naguib”, en memoria del quien fuera el primer presidente de Egipto, estuvo encabezado por el comandante supremo de las Fuerzas Armadas, el mandatario Abdel Fatah al-Sisi, según informa el sitio web Youm7.
Como parte del evento, que contó con la presencia de cientos de estudiantes de academias y universidades militares egipcias, se desarrolló un gran desfile de diversos tipos de armamento, como carros blindados, helicópteros y naves de combate y sistemas de defensa antiaérea del país.
Además, el príncipe heredero de Abu Dabi, Mohammed bin Zayed; el emir de La Meca, el príncipe Jaled Al Saud; el príncipe heredero de Baréin, Salman Al Jalifa, entre otras autoridades participaron en el acto que concluyó con un concierto.
Las instalaciones militares recién abiertas incluyen 1155 cuarteles, almacenes, armerías, mezquitas, otros edificios y un total de 72 polígonos de tiro y campos de entrenamiento para distintas ramas del Ejército. En el enorme recinto podrán alojarse unos 20.000 soldados.
La base incluye también una zona de portatanques con capacidad para 451 unidades y un aeródromo para helicópteros.
Dada la grave crisis que atraviesa Egipto, el Gobierno egipcio depende económicamente de Arabia Saudí. Según analistas, Al-Sisi entregó a su aliado saudí dos islas a cambio de que Riad le conceda millones de dólares en ayudas e inversiones.
De acuerdo con los medios, esta base se encargará de reforzar principalmente la protección del territorio al oeste de Alejandría, la segunda ciudad más grande en Egipto, donde se emplaza la primera planta nuclear del país en la localidad de Dabaa, así como grandes yacimientos de petróleo y un puerto marítimo.
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