El 6 de agosto, una veintena de personas, encabezada por un militar disidente de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), a través de un vídeo, se declaró “en legítima rebeldía” contra la “tiranía” del Gobierno del presidente Nicolás Maduro y en respuesta a la instalación de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC). Horas después, las fuerzas venezolanas sofocaron el ataque, abatieron a dos de los “agresores paramilitares” y detuvieron a ocho de ellos, de los cuales uno estaba herido.
El domingo, el director del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin), Gustavo González López, en una transmisión en vivo del canal estatal, Venezolana de Televisión, precisó que un total de 18 personas, entre civiles y militares, fueron detenidas por su presunta vinculación con dicho asalto, catalogado de "terrorista" por el Gobierno.
Seis exmilitares desertores, entre ellos se encuentra el excapitán Juan Carlos Caguaripano, quien grabó un vídeo difundido a través de las redes sociales, y otros funcionarios dados de baja por faltas contra el decoro y el honor militar, estuvieron acompañados por voceros de oposición, miembros de gremios y empresarios, detalló González López.
El asalto guarda relación “con la permanente acción delictiva de grupos opositores que pretenden el derrocamiento del Gobierno del presidente Nicolás Maduro”, aseguró el director del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin), Gustavo González López.
Sobre otras 23 personas pesan órdenes de búsqueda, entre ellas nueve por la Interpol, dijo el funcionario, además de dar a conocer que el Sebin recuperó parte del lote de armas robado en el recinto militar: 21 fusiles AK103, tres lanzagranadas, pistolas, prendas militares, equipo de comunicaciones y municiones.
"Se ha procedido al aseguramiento preventivo e incautación de bienes, como el congelamiento de cuentas que sirvieron de soporte a las estructuras terroristas que se han venido organizando en el país", enfatizó el director.
El asalto guarda relación “con la permanente acción delictiva de grupos opositores que pretenden el derrocamiento del Gobierno del presidente Nicolás Maduro”, evaluó González López.
El ataque se produjo en rechazo de la instalación de ANC, una instancia convocada por el mandatario Maduro para consolidar los organismos públicos y acabar con la violencia que vive desde abril el país bolivariano.
Venezuela denuncia que enfrenta un complot, orquestado desde el exterior y, en particular, sindica a EE.UU., para derrocar al Gobierno legítimo de Maduro, cuya decisión de instalar la ANC fue respaldada por más de 8 millones de votantes.
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