En un comunicado emitido la madrugada de este sábado, la Cancillería de Turquía ha expresado su profunda preocupación ante la decisión de Baréin de establecer relaciones diplomáticas con Israel.
El pacto, ha agregado, contradice el ‘Plan de Paz Árabe’, mediante el cual, los países árabes acordaron que reconocerían la “existencia de Israel” y normalizarían sus relaciones con dicho régimen, si se estableciera el Estado de Palestina, bajo la solución de dos Estados.
“Esta medida asestará un nuevo golpe a los esfuerzos destinados a defender la causa palestina (…) Esta acción alentará a Israel a continuar con sus acciones ilegítimas contra Palestina y sus intentos por ocupar más tierras palestinas”, ha denunciado el canciller turco.
Por su parte, el ministro jordano de Asuntos Exteriores, Ayman al-Safadi, ha insistido en que la paz, la seguridad y la estabilidad de la región de Asia Occidental dependen del fin de la ocupación israelí y la recuperación de todos los derechos del pueblo palestino, ya que la raíz del conflicto es la usurpación.
“Si la ocupación persiste e Israel continúa anexionándose las tierras palestinas, construyendo y expandiendo asentamientos e invadiendo la Mezquita de Al-Aqsa, el conflicto se intensificará y la región no disfrutará de una paz justa”, ha recalcado.
Baréin sigue los pasos de los Emiratos Árabes Unidos (EAU), que anunciaron el pasado 13 de agosto la normalización de los nexos con el régimen israelí, una acción ampliamente rechazada por varios países del mundo.
Diferentes movimientos y comités de resistencia de Palestina han condenado el pacto, considerándolo como otra puñalada por la espalda al pueblo palestino.
La Autoridad Nacional Palestina (ANP) ha llamado a consultas a su embajador en Baréin, en reacción a la decisión de Manama de establecer los nexos con el régimen de Tel Aviv.
msm/ctl/rba