El acto de protesta ha tenido lugar en la calle comercial de Istiklal, en el centro de la ciudad, donde los manifestantes intentaron alcanzar la plaza Taksim, símbolo de las manifestaciones antigubernamentales, sin embargo, la policía acordonó la plaza y sólo dejó pasar a transeúntes.
Unos 25.000 policías, apoyados por 50 blindados, rodeaban la plaza tras haber evacuado y acordonado el adyacente parque Gezi.
Los movilizadores han gritado consignas en recuerdo a las víctimas, y en contra del Gobierno: "Les llegará la hora de rendir cuentas", y "en todas partes está Taksim" y "en todas partes hay resistencia".
Por último han pedido justicia para las víctimas de las protestas de 2013 que se saldaron con ocho muertos, más de 8000 heridos y gran número de detenciones.
Las protestas en Turquía comenzaron a mediados de 2013, cuando las fuerzas de seguridad reprimieron una sentada que tuvo lugar en la Plaza de Taksim, en Estambul, contra el proyecto de demoler el Parque Gezi.
Desde entonces, Turquía atestiguó numerosas movilizaciones en contra de las medidas represivas y el uso de fuerza excesiva de los agentes de seguridad del Gobierno del entonces premier y ahora presidente, Recep Tayyip Erdogan.
En 2014, la Policía turca reprimió a manifestantes que se habían congregado en el parque Gezi, para celebrar el Día Internacional del Trabajador.
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