El mandatario ruso, desde la península de Crimea, ha vuelto este viernes a acusar al Gobierno de Ucrania de planear actos subversivos en la península por su incapacidad para resolver los problemas internos y porque "no quiere" o "no puede" cumplir con los acuerdos de alto el fuego firmados el año pasado en Minsk (Bielorrusia) sobre la situación en el este de Ucrania.
“Está claro por qué se hizo porque, por alguna razón, (el Gobierno ucraniano) no quiere o no puede cumplir los acuerdos de Minsk (…) Parece que nuestros socios de Kiev han tomado la decisión de agravar la situación”, ha afirmado, citado por la agencia rusa de noticias RIA Novosti.
Está claro por qué se hizo porque, por alguna razón, (el Gobierno ucraniano) no quiere o no puede cumplir los acuerdos de Minsk (…) Parece que nuestros socios de Kiev han tomado la decisión de agravar la situación”, ha afirmado el presidente de Rusia, Vladimir Putin.
Putin formula esta acusación en momentos en que Ucrania y la Federación Rusa viven una nueva escalada de tensiones a raíz del anuncio que hizo el 10 de agosto el Servicio Federal de Seguridad (FSB) en el que asegura haber prevenido una serie de ataques contra estrategicas infraestructuras de Crimea que, según FSB, fue planificada por la inteligencia militar de Kiev.
Tras el informe del FSB, Ucrania puso en máxima alerta a sus tropas en la frontera con Crimea y en la línea de separación con los independentistas del este del país, acusando a Moscú de fomentar enfrentamientos en su territorio. Por su parte, Rusia ha colocado en Crimea su sistema más avanzado de misiles de defensa antiaérea, el S-400 Triumf.
Los crimeos eligieron en 2014 mediante referéndum (no reconocido por Kiev) independizarse de Ucrania y reincorporarse a la Federación Rusa; una decisión que ha deteriorado las relaciones entre Rusia y el Occidente.
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