Organizaciones internacionales como UNICECF y las cifras del Ministerio de Salud demuestran que la desnutrición en Guatemala se mantiene en un promedio de uno de cada dos niños menores de cinco años.
El Frente Parlamentario Contra el Hambre reporta a más de tres millones de guatemaltecos que se encuentran en riesgo debido a la falta de alimentación.
Aunque haya voluntad, las cifras de desnutrición no ceden, sobre todo porque existe una seria incapacidad para ejecutar el presupuesto, incluso la reducción a programas contra la desnutrición.
A pesar de que existen programas de alimentación gratuita, la enfermedad no da tregua y Guatemala se mantiene como el país más desnutrido de América Latina y el sexto más desnutrido a nivel mundial según cifras de UNICEF.
Si la desnutrición crónica y aguda ya es una tragedia en términos generales porque es una enfermedad que afecta de por vida a quienes la padecen, en las áreas rurales del Guatemala la situación se agrava.
La realidad es cruda en las aldeas lejanas, la muerte está a la orden del día debido a infecciones y otras enfermedades que van de la mano con la pobreza.
Las muertes por desnutrición siguen en aumento, del 2025 no hay cifras exactas, pero en el 2024 se reportaron más de 80 muertes por desnutrición, más el subregistro que es alarmante subraya el presidente del Frente Parlamentario Contra el Hambre.
Miguel Salay, Ciudad de Guatemala.
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