El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Irán, Naser Kanani, ha criticado este domingo las acciones de los países occidentales, aliados de Israel, respecto a la continuación de la guerra en Gaza, que ha provocado la muerte de al menos 26 000 palestinos, entre ellos unos 18 000 niños y mujeres, y el desplazamiento de más de 1 900 000 de los 2 200 000 habitantes del enclave costero.
“Los partidarios del régimen sionista deberían avergonzarse del colmo de su degeneración moral en cuanto al destino de los residentes de Gaza”, ha censurado.
En este sentido, ha declarado que la situación en Gaza pulverizó la credibilidad de los lemas y las instituciones occidentales pro derechos humanos, y desenmascaró la hipocresía de los reclamantes occidentales de los DD.HH., entre ellos el Gobierno de Estados Unidos.
Según el Ministerio de Salud de Gaza, el número de las víctimas mortales de los ataques israelíes ha llegado a 26 257 y la cifra de los heridos ha ascendido a 64 797 en el 114.º día de la guerra.
El coordinador médico de Médicos Sin Fronteras en los territorios ocupados palestinos, Guillemet Thomas, ha advertido de que la vida de la gente en Gaza está en peligro porque esta zona carece de toda atención médica.
Ante esta coyuntura, Estados Unidos, el Reino Unido, Italia, Finlandia, los Países Bajos, Australia, Alemania y Escocia, han suspendido su ayuda financiera a la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina (UNRWA, por sus siglas en inglés), tras las acusaciones sin fundamento del régimen israelí sobre vínculos entre este organismo y los grupos de Resistencia.
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