A Irán no le preocupa que la cuestión del yacimiento de gas de Arash, conocido en Kuwait como Al-Durra, se convierta en un problema en las relaciones bilaterales con el país árabe, ha subrayado Ali Asqar Jayi, asesor principal del canciller iraní, en una entrevista con la cadena yemení Al Masirah, publicada este domingo.
Según el funcionario iraní, los dos países podrían resolver la disputa sobre el campo de gas de importancia estratégica a través de la cooperación sobre la base de la situación histórica de ambas naciones.
El diplomático ha puesto de manifiesto que Irán es “muy optimista” sobre la resolución del asunto, a pesar del ambiente negativo que algunos medios de comunicación buscan utilizar para generar discrepancia entre los países de la región.
“Somos muy optimistas sobre un acuerdo sobre el campo de gas de Arash, independientemente de la atmósfera negativa que algunos medios de comunicación quieren utilizar para crear discordia entre los países de la región”, ha puntualizado.
Los comentarios se producen después de una serie de declaraciones de funcionarios kuwaitíes que afirman que su país y Arabia Saudí poseen derechos exclusivos sobre los recursos de Arash, un campo que se extiende a ambos lados de un área no demarcada en aguas iraníes y kuwaitíes en el Golfo Pérsico.
Mientras tanto, algunos expertos creen que Irán podría tener la mayor parte del campo de gas si se demarcan sus fronteras con Kuwait.
Las autoridades iraníes han expresado su descontento por un contrato firmado el año pasado entre Kuwait y Arabia Saudí que les permite desarrollar el campo y compartir sus recursos sin la participación de Irán.
Sin embargo, el alto diplomático iraní al afirmar que la disputa por el gas con Kuwait puede resolverse por medios pacíficos, ha precisado que Irán y Kuwait han celebrado rondas de negociaciones técnicas sobre el tema en los últimos años. “Esta cuestión no será complicada y puede resolverse gracias a la buena voluntad de las autoridades iraníes”, ha apostillado.
Las autoridades iraníes han criticado repetidamente que se trata de una “reserva compartida” y que ninguna parte de este trío puede iniciar trabajos de desarrollo ahí sin el visto bueno de las otras.
El ministro iraní de Petróleo de Irán, Yavad Oyi, avisó el pasado 30 de julio que Irán no se quedará de brazos cruzados ante cualquier movimiento de Kuwait o Arabia Saudí en el referido yacimiento de gas disputado en el Golfo Pérsico.
“Si no hay deseo de entendimiento y cooperación, Irán tomará en la agenda proteger sus derechos y beneficios, así como la explotación y la exploración de los recursos y no tolerará ninguna pérdida de sus derechos”, adujo.
hnb
