Este lunes, se desencadenaron enfrentamientos entre las fuerzas sionistas y los palestinos, por una redada del ejército israelí en la ciudad cisjordana de Yenín. El nuevo escenario de la brutalidad de Israel ha dejado cinco palestinos muertos y 91 heridos.
El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Irán, Naser Kanani, ha rechazado esta misma jornada “la intensificación de las medidas criminales de los sionistas en Cisjordania y la Franja de Gaza en los últimos meses y la masacre de los ciudadanos palestinos, incluidos niños, mujeres y ancianos, así como la destrucción de propiedades y hogares de los palestinos”.
Dichas medidas, ha alertado, constituyen “evidentes ejemplos del crimen organizado y el terrorismo oficial” promovido por el régimen sionista.
El funcionario persa ha llamado a la comunidad internacional, en particular a la Organización de las Naciones Unidas (ONU), a asumir su “responsabilidad urgente” de adoptar “medidas disuasivas ante las conductas inhumanas” de Israel.
Asimismo, ha tachado de “preocupante” la inacción de la ONU y los países del mundo ante la expansión de los asentamientos del régimen sionista en la Cisjordania ocupada.
De hecho, al criticar duramente el silencio y la pasividad de los gobiernos occidentales ante las políticas expansionistas de Israel, ha exigido a los países, que apoyan la cuestión palestina, que “cumplan con su responsabilidad legal, humana y moral para defender los derechos de la oprimida nación palestina y sancionar al régimen sionista por sus crímenes y acciones que violan las leyes y normas internacionales”.
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