Transcurridos tres meses de la retención ilegal del avión 747 de la empresa venezolana EMTRASUR y de su tripulación en Argentina, aumentan los esfuerzos para esclarecer la verdadera razón de dichas infundadas acusaciones contra la tripulación. La familia del capitán Gholamreza Ghasemi en una entrevista exclusiva con HispanTV, denunció esta actuación anómala.
De esta manera, queda en vano una de sus excusas para retener el avión. El juez autorizó el 25 de junio la liberación de la carga, lo que les llevó a inventar otro motivo para mantener la aeronave inmovilizada. Esta vez, se enfocaron en la propiedad del avión, involucrando a la aerolínea iraní, Mahan, en el caso.
Al mismo tiempo, intensificaron las presiones desde Argentina, argumentando que es sospechosa la presencia de la tripulación iraní en el avión.
Según el hijo del capitán Ghasemi, en este periodo, el piloto iraní había tenido más de cien despegues y aterrizajes en diversos destinos latinoamericanos, y nunca les había pasado algo similar.
Los expertos que siguen de cerca este caso, destacan la clara brecha entre el gobierno argentino, que califica de errónea esta detención, y el poder judicial de este país, que hasta el momento no ha presentado ninguna alegación razonable y únicamente se rige por las pistas facilitadas por los lobbies israelíes.
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