“Todas las acciones del régimen sionista contra las infraestructuras sirias, tanto civiles como militares, son ilegales y contrarias al derecho internacional”, ha recalcado este lunes el portavoz de la Cancillería iraní, Naser Kanani, en alusión a los continuos ataques llevados a cabo por Israel en zonas controladas por el Gobierno sirio.
Israel ha multiplicado en las últimas semanas los ataques con misiles a las infraestructuras vitales de Siria, incluidos los aeropuertos e instalaciones militares administrados por Damasco, para frenar supuestamente las fuerzas proiraníes en el país árabe.
El vocero de la Diplomacia iraní ha aprovechado su rueda de prensa semanal para negar cualquier vínculo entre la República Islámica y las zonas atacadas, tal y como alegan algunos medios y autoridades israelíes. Son pura “mentira”, ha insistido.
Ha rechazado que el país persa haya desplegado combatientes o establecido bases militares en Siria. “Irán tiene presencia en Siria a petición oficial del gobierno de este país y brinda servicios de asesoramiento”, detalla.
Kanani ha dejado en claro que la República Islámica continuará teniendo presencia en Siria siempre y cuando el Gobierno y el pueblo sirios se lo pidan y seguirá apoyando a los sirios en la lucha contra el terrorismo.
Desde el estallido del conflicto en el país árabe en 2011, el régimen de Tel Aviv ataca con frecuencia objetivos militares o civiles en el territorio sirio, usando el espacio aéreo de El Líbano o el ocupado Golán sirio.
El jueves, el ministro de Asuntos Exteriores sirio, Faisal al-Miqdad, instó a Israel a no jugar con fuego y aseguró que el régimen israelí pagará el precio de sus agresiones en el territorio sirio.
Damasco denuncia que los bombardeos de Israel buscan apoyar a los terroristas activos en Siria, en momentos en que el país árabe se sigue esforzando para restablecer la seguridad y estabilidad tras años de conflicto.
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