• El vicecanciller iraní para Asuntos Jurídicos e Internacionales, Seyed Abás Araqchi, asiste a la reunión extraordinaria de la OCI en la ciudad saudí de Yeda, 21 de enero de 2016.
Publicada: viernes, 22 de enero de 2016 14:05

La Cancillería iraní llama a los países musulmanes a aprender de la exitosa experiencia de los diálogos Irán-Grupo 5+1 para poner fin a los problemas que azotan el mundo del Islam.

“La experiencia de los diálogos nucleares puede servir como modelo exitoso para acabar con las discordias y los conflictos que existen en el mundo del Islam”, consideró el jueves el vicecanciller iraní Seyed Abás Araqchi.

La experiencia de los diálogos nucleares puede servir como modelo exitoso para acabar con las discordias y los conflictos que existen en el mundo del Islam”, consideró el jueves el vicecanciller iraní Seyed Abás Araqchi.

En su intervención durante la reunión extraordinaria de la Organización para la Cooperación Islámica (OCI) celebrada el jueves en la ciudad saudí de Yeda, Araqchi recordó que la implementación del Plan Integral de Acción Conjunta (JCPOA, en inglés) y el levantamiento de sanciones antiraníes suponen el reconocimiento mundial del derecho de Irán a desarrollar sus pacíficas actividades nucleares.

El diálogo y la diplomacia pueden servir también como ejemplo a seguir para acabar con los problemas de Oriente Medio, por más que ciertos actores de la región no estén interesados en el fin de las tensiones y se opongan a tal posibilidad, observó Araqchi.

“Pese a que la política prioritaria de la República Islámica de Irán consiste en fortalecer la unidad y la solidaridad islámicas y resolver las tensiones con los vecinos, desafortunadamente no ha recibido respuestas adecuadas para el inicio de diálogos e intercambio de ideas”, precisó.

Pese a que la política prioritaria de la República Islámica de Irán consiste en fortalecer la unidad y la solidaridad islámicas y resolver las tensiones con los vecinos, desafortunadamente no ha recibido respuestas adecuadas para el inicio de diálogos e intercambio de ideas”, precisó.

Sobre el motivo de la celebración de la reunión —las violentas protestas ocurridas en Irán ante las sedes diplomáticas saudíes por la ejecución del prominente sheij chií Nimr Baqer al-Nimr—, Araqchi reiteró la condena de esos actos por Teherán, y prometió el próximo anuncio de los resultados de las investigaciones exhaustivas llevadas a cabo para identificar y castigar a sus autores.

El canciller saudí, Adel al-Yubeir, asiste a la reunión extraordinaria de la OCI en Yeda, 21 de enero de 2016.

 

Aun con todo, el vicecanciller iraní para Asuntos Jurídicos e Internacionales calificó como “lamentable” la reacción inmediata de la OCI a la demanda saudí convocando de una sesión extraordinaria, mientras el Gobierno palestino lleva años esperando una reunión para analizar los ataques israelíes a la Mezquita Al-Aqsa, en Al-Quds (Jerusalén).

“La OCI mantiene silencio sobre problemas y grandes retos del mundo del Islam como la lucha contra el terrorismo, el extremismo y el sectarismo”, denunció Araqchi, para después apuntar las causas de este fenómeno, así como el papel desempeñado por ciertos países en provocar y mantenerlo, no son ya un secreto para nadie.

Arabia Saudí rompió sus relaciones diplomáticas y comerciales con Irán tras las protestas llevadas a cabo el 2 de enero frente a sus sedes diplomáticas en Teherán (capital) y Mashad (noreste) en reacción a la ejecución del sheij Nimr Baqer al-Nimr por el régimen de los Al Saud.

Las autoridades persas, apenas ocurridos los asaltos, expresaron su indignación y prometieron proteger todas las sedes diplomáticas presentes en territorio iraní y, más adelante, detuvieron a más de 50 personas en relación con los hechos.

El portavoz de la Cancillería iraní, Husein Yaber Ansari, insistió el mismo día en la necesidad de proteger la seguridad de las sedes diplomáticas saudíes y llamó a evitar toda concentración frente a esos lugares.

Días después, Yaber Ansari denunció la decisión saudí de cortar lazos con Irán como prueba de que Riad busca generar tensiones como vía para promover sus intereses.

Según expertos en asuntos de índole política, Arabia Saudí está tratando, por medio de tales iniciativas y a un nivel bastante amplio, de reunir apoyos contra Irán, pero el resultado obtenido ha sido el aumento de su aislamiento.

El 19 de enero, el diario estadounidense The Wall Street Journal indicó que, pese a que Arabia Saudí goza del apoyo de algunos de sus más cercanos aliados en la postura que adopta contra Irán, los esfuerzos de este país árabe por crear un amplio bloque antiraní chocan con los límites de su influencia en el mundo musulmán.

tas/mla/hnb