Han sido amplias y variadas las reacciones a la incursión militar israelí a Rafah. Pese a los llamados de la comunidad internacional, Israel ha avanzado con sus planes de invadir el sur de la Franja de Gaza; una postura que ha generado rechazos tanto a nivel regional como internacional. El Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina, HAMAS, denunció en una declaración, que el régimen israelí, con la escalada en Rafah, busca sabotear las conversaciones en curso para lograr un acuerdo de alto el fuego en Gaza.
A su vez, el jefe de la ONU destacó la importancia de un alto el fuego para evitar más muertes y destrucción en la Franja de Gaza. E instó a Israel a que detenga cualquier escalada y participe de manera constructiva en las conversaciones diplomáticas en curso.
A la par, el jefe de la diplomacia de la Unión Europea (UE), Josep Borrell, advirtió de que no existe una zona segura en Gaza a la que puedan huir los civiles palestinos.
Por otro lado, Irán denunció que la toma por parte del ejército israelí del lado palestino del cruce de Rafah, es un intento por parte de Tel Aviv de derrotar los esfuerzos internacionales para poner fin al genocidio en Gaza. Recalcó que la ofensiva muestra la rapacidad de un régimen canalla que no se ciñe a ninguna norma internacional. Mientras, China pidió a Israel dejar de atacar Rafah y evitar un desastre humanitario más grave, en la Franja de Gaza.
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