En una entrevista concedida el miércoles a la cadena catarí Al-Jazeera, el jefe de la dirección política del Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS), Ismail Haniya, alertó al régimen de Israel que si retoma agresiones contra Al-Quds (Jerusalén), la Resistencia defenderá a los palestinos, respondiendo a los agresores.
La Resistencia palestina tiene todas las opciones sobre la mesa, advirtió Haniya, aconsejando al régimen sionista que tenga en cuenta este mensaje.
El dirigente de HAMAS lanzó esa nueva advertencia contra cualquier repetición de escenario de las atrocidades de las fuerzas israelíes contra Al-Quds y la Mezquita Al-Aqsa, que causaron el estallido de la nueva escalada entre Israel y la Resistencia palestina en la Franja de Gaza.
Efectivamente, la Resistencia palestina salió en defensa de los residentes de Al-Quds y lanzó ataques de represalia contra las posiciones israelíes. El ejército del régimen usurpador, por su parte, realizó una campaña brutal de bombardeos contra la Franja de Gaza, que se cobró la vida de más de 250 civiles palestinos.
La semana pasada, Israel aprobó “sin condiciones” la propuesta egipcia de un cese bilateral de las hostilidades con la Resistencia palestina en el enclave costero.
Conforme destacó Haniya, la Resistencia descartó que Al-Quds fuera objeto a negociación y aclaró a EE.UU. e Israel que este tema supone su “línea roja”.
Haniya aseveró que, durante la ofensiva de los grupos palestinos, denominada ‘Espada de Al-Quds’, la Resistencia perseguía acceder a toda la geografía de la Palestina ocupada, si bien, después de la tregua, no materializó esa decisión, agregó.
‘Espada de Al-Quds’ tumbó complots de los israelíes
Asimismo, destacó cómo la Resistencia frustró los planes de los sionistas para librar una batalla terrestre en Gaza, eliminar el liderazgo político y militar de la Resistencia y destruir los túneles de los combatientes palestinos.
Por otro lado, prosiguió que la reciente victoria de los grupos palestinos ha tumbado el proceso de la normalización de ciertos países árabes con Israel, así como el llamado ‘acuerdo del siglo’ de Estados Unidos; un proyecto que los palestinos consideran exclusivamente proisraelí y excluyente de sus derechos.
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