A partir del 21 de septiembre de 2022, se produjo un enjambre de terremotos en la provincia noroccidental iraní de Azerbaiyán Occidental, cerca de la ciudad de Joy, cerca de la frontera con Turquía.
El terremoto de magnitud 5,9 que sacudió la ciudad de Joy y las aldeas cercanas el 28 de enero produjo daños más graves que los otros anteriores, matando a tres personas e hiriendo a otros cientos, casi todos debido al pánico y solo unas pocas por el derrumbe de casas, además de provocar daños materiales en la zona.
Diferentes órganos provinciales y estatales se movilizaron para prestar servicios y ayudar a los afectados por el seísmo.
Durante la fase inicial, el Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) de Irán brindó asistencia básica a casi todas las familias que se habían visto afectadas física y mentalmente con necesidades urgentes, en particular los ancianos, los hogares encabezados por mujeres y aquellos con necesidades especiales.
“La operación de rescate y socorro se llevó a cabo en menos de 5 horas con la cooperación de los órganos ejecutivos, las instituciones y la Organización de Gestión de Crisis”, aseveró el gobernador de la provincia, Mohamad Sadeq Motamedian.
Luego de los dos terremotos recientes en la ciudad de Joy, 2120 unidades fueron completamente destruidas, 11 100 resultaron dañadas y 1500 unidades de ganado también fueron destruidas y necesitan ser reconstruidas, según el funcionario.
Según el gobernador, 24 horas después del reciente terremoto, las víctimas del terremoto fueron alojadas en campamentos de emergencia y se distribuyeron tiendas de campaña en las aldeas.
Hasta el momento, se han establecido 110 campamentos en la ciudad que han alojado a 130 mil personas y se ha instalado más de 40 000 carpas en las zonas damnificadas por el movimiento telúrico, agregó.
Agradeciendo al presidente, Seyed Ebrahim Raisi, y altos funcionarios del país por su presencia en las zonas afectadas y dar el seguimiento a la situación de las víctimas, Motamedian indicó que el Gobierno destinó una subvención de más de 105 millones de tomanes (moneda iraní) a los afectados por el terremoto.
En alusión al monto del préstamo para las unidades afectadas por el terremoto, el viceprecidente de la Fundación Vivienda de la Revolución Islámica, Majid Jodi, detalló que se han fijado 300 millones de tomanes para la zona urbana con una tasa de interés del 5 % y 250 millones de tomanes para la zona rural con una tasa de interés del 4 %. Además, se destina una subvención de 105 millones de tomanes en las ciudades y 90 millones de tomanes en las zonas rurales.
A estos se suman la asignación de varillas, puertas y ventanas gratuitas y otros materiales a las viviendas de los damnificados, así como la distribución de cientos de miles de equipos de calefacción, mantas, alimentos y otras ayudas y servicios para aliviar el sufrimiento de las víctimas.
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