Primera vez en su historia, México elegirá a jueces, magistrados y ministros mediante voto popular. La propuesta fue celebrada por la presidenta Claudia Sheinbaum, quien declaró que a partir de este mecanismo “México será el país más democrático del mundo” porque su electorado votará a los tres poderes del Estado.
El país azteca registra 99,7 millones de ciudadanos habilitados para votar en este proceso que contará con 84 000 casillas.
Durante la veda electoral quedan prohibidas todas las actividades de propaganda por parte de las candidaturas al Poder Judicial local, incluyendo reuniones públicas, debates, asambleas y cualquier acto en el que se solicite el voto.
Uno de los mayores obstáculos previstos es la baja participación en las urnas. Según una estimación del 26 de mayo, la participación electoral prevista es del 22,9 %, según una encuesta encargada por los medios EL PAÍS y W Radio a Enkoll.
La elección se lleva a cabo en dos etapas: la primera el domingo 1 de junio y la segunda se proyecta para 2027. En esta oportunidad, los mexicanos acudirán a las urnas para elegir entre aproximadamente 5000 candidatos que compiten por más de 840 puestos de jueces y magistrados federales, incluyendo todos los magistrados de la Suprema Corte.
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