• El embajador de Corea del Norte en Malasia, Kang Chol.
Publicada: sábado, 4 de marzo de 2017 18:45

Malasia ha expulsado al embajador norcoreano en Kuala Lumpur, después de que ‎este cuestionara la validez de las investigaciones sobre la muerte de Kim Jong-nam.‎

En un comunicado difundido este sábado la Cancillería malasia ha declarado persona “non grata” a Kang Chol y le ha otorgado un plazo de 48 horas para abandonar el país del sudeste asiático.

Las relaciones entre Malasia y Corea del Norte están muy deterioradas desde el sospechoso asesinato del hermanastro del líder norcoreano el pasado 13 de febrero en el Aeropuerto Internacional de Kuala Lumpur, capital malasia.

El exiliado Kim Jong-nam fue atacado por dos mujeres en la sala de salida del aeropuerto. Las atacantes, ambas detenidas, utilizaron el agente neurotóxico VX para matarlo, según los informes. El resultado de la autopsia confirmó el uso del agente químico VX en muestras de la cara y los ojos de la víctima.

No obstante, Pyongyang puso en entredicho la credibilidad de la investigación de las autoridades malasias y acusó a Kuala Lumpur y a EE.UU. de confabularse con Corea del Sur para culpar a Corea del Norte.

 

Corea del Norte denunció además, que Malasia realizara una autopsia "inmoral e ilegal" en el cadáver de "un ciudadano" norcoreano que "portaba un pasaporte diplomático". Lamentó, además, que la Policía secreta malasia “asumiera como un hecho el falso informe surcoreano” sobre el envenenamiento del fallecido.

El Gobierno malasio exigió formalmente el 28 de febrero una disculpa por escrito a Corea del Norte por las acusaciones de Kang contra las autoridades malasias relacionadas con la autopsia de Kim, pero finalmente no se produjo.

El Gobierno de Kuala Lumpur canceló el jueves la libre-entrada de visados para los norcoreanos y convocó a su enviado a Pyongyang. El vice primer ministro malasio, Ahmad Zahid Hamidi, dijo que la decisión había sido tomada por "razones de seguridad nacional".

Malasia hasta el momento no ha hecho comentarios sobre las acusaciones de Seúl de que Corea del Norte había orquestado el asesinato de Kim Jong-nam. Pyongyang, por su parte, ha negado rotundamente cualquier implicación en el homicidio.

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