“El Gobierno actual debe trabajar arduamente para atender a las demandas de los ciudadanos para reducir su sufrimiento y miseria”, ha dicho el representante del influyente clérigo en un mensaje pronunciado en el sermón del viernes en la ciudad santa de Kerbala.
Sistani hace así un llamamiento a la Administración del primer ministro iraquí, Haidar al-Abadi, a satisfacer con urgencia las reclamaciones por la supuesta corrupción gubernamental y por las deficiencias de los servicios públicos en las ciudades del sur del país.
Las manifestaciones del sur de Irak se iniciaron el 8 de julio en la ciudad de Basora, un importante centro de exportación de petróleo, en un clima de preocupación aguda por la extensión del desempleo y la escasez de electricidad y agua; después se han extendido a varias ciudades más, incluidas Nayaf, Amara, Nasiriya y Bagdad, la capital.
El Gobierno actual debe trabajar arduamente para implementar las demandas de los ciudadanos para reducir su sufrimiento y miseria”, ha dicho el representante del gran clérigo chií de Irak, el gran ayatolá Seyed Ali Sistani.
El momento de las manifestaciones es crítico debido a que las formaciones políticas están tratando de formar un Gobierno de coalición, después de las elecciones parlamentarias del 12 de mayo.
En un intento por ayudar a restaurar la calma en la provincia, rica en petróleo, Al-Abadi visitó Basora prometiendo “tomar medidas legales de contingencia” contra los cabecillas de las manifestaciones.
El ayatolá Sistani, sin embargo, ha dicho que el próximo primer ministro deberá trabajar para combatir la corrupción gubernamental. “(El nuevo primer ministro) deberá lanzar una guerra implacable contra los corruptos y quienes los protegen”, ha dicho su representante.
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