En declaraciones a la prensa durante una visita a la franja fronteriza, Hamid al-Hussieni, comandante de la Guardia Fronteriza iraquí, dijo que tal logro deja de todo intento de filtración de los terroristas desde el territorio sirio.
Agregó que se ha instalado alambre de púas desde el triángulo iraquí-sirio-jordano hasta el extremo de la región norte del río Éufrates en la ciudad iraquí de Al-Qaem, en el extremo oeste de la provincia de Al-Anbar.
Funcionarios iraquíes han revelado anteriormente que la valla de separación incluye alambre de púas electrificado y torres de vigilancia especiales con cámaras de imágenes térmicas que tienen la capacidad de detectar infiltrados durante todo el día.
A pesar de que a finales de diciembre de 2017, el primer ministro iraquí, Haidar al-Abadi, anunció el fin de la guerra contra EIIL en el país árabe Irak, después de que las fuerzas militares del país purgaran por completo las provincias de Al-Anbar y Nínive, células aisladas vinculadas a la banda permanecen activas en ciertas partes del país, sobre todo en la frontera con Siria.
Para eliminar a todos los integrantes de la banda takfirí, las Fuerzas Armadas de Irak lanzaron el pasado mes de abril una operación a gran escala, aún en marcha, en varias partes del país, en cooperación con las Unidades de Movilización Popular (conocido por Al-Hashad Al-Shabi en árabe).
Al-Abadi prometió que las fuerzas gubernamentales actuarán contra Daesh en el país y en la región, sobre todo en Siria, donde la aviación militar iraquí ya ha llevado a cabo varios bombardeos aéreos contra posiciones de la banda extremista.
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