Unos 300 voluntarios se encargaron el miércoles por la noche de repartir más de 30.000 banderas a favor de la independencia de Cataluña (conocidos como esteladas), en el exterior del estadio antes del comienzo del encuentro entre el Barça y el BATE Borisov.
Una parte mayoritaria del público dedicó, además, una sonora pitada al himno de la Champions League y, al acabar la música, entonaron cánticos de "¡Independencia!".
Además, antes del pitido del árbitro, la entidad azulgrana desplegó una pancarta situada en una de las tribunas del estadio con el mensaje "Respecte" ("Respeto").
La Comisión Disciplinaria de la UEFA sancionó con 40.000 euros al club azulgrana por lo sucedido en el partido de hace unas semanas ante el Bayer Leverkusen.
La repartición de banderas tenía como objetivo que los aficionados que asistieran al partido de Champions entre el FC Barcelona y el BATE Borisov bielorruso, "sean independentistas o no", mostrasen este símbolo que consideran pacífico y legal.
En las últimas horas, además, ha transcendido que el máximo organismo del fútbol europeo ha suspendido cautelarmente la posibilidad de sancionar otra vez al Barcelona hasta que el proceso llegue a su conclusión, en este caso, hasta que, en última instancia, se pronuncie el Tribunal Arbitral del Deporte (TAS).
A pesar de este acuerdo temporal al que han llegado el club azulgrana y la UEFA, muchos han sido los aficionados del club catalán que han mostrado su disconformidad con las dos sanciones percibidas hasta la fecha. La primera de ellas fue a raíz del mismo hecho, pero durante la final de la Liga de Campeones celebrada en Berlín, y el Barcelona tuvo que desembolsar 30.000 euros.
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