Miles y miles de personas ocuparon los predios del Capitolio de Washington. Los colores de Palestina, así como el reclamo por justicia ante las instituciones que patrocinan los planes de genocidio en contra de más de dos millones de seres humanos en Gaza y otros millones más en los territorios ocupados por la entidad terrorista autodenominada “Israel”.
Increíblemente, a pesar de las imágenes, atrocidades y las masivas protestas, solo una minoría casi marginal de los legisladores estadounidenses demanda un cese al fuego a la entidad sionista. El resto se encuentra engordando sus cuentas bancarias.
Desde la Oficina Oval, las barras y las estrellas amparan a un criminal de guerra y a sus esbirros extremistas (Benjamín Netanyahu).
Desde 1948 a 2022, Estados Unidos le ha entregado al ente colonial sionista alrededor de 260 000 millones de dólares. Sin embargo, estos son presupuestos oficiales. En términos de los así llamados “presupuestos negros”, otros cientos miles de millones de dólares van desde Washington hacia Tel Aviv.
Marcelo Sánchez, Washington.
xsh/rba
