La Armada estadounidense ha ordenado interrumpir algunas misiones no críticas con el objetivo de efectuar una revisión de riesgos y de errores, después de que unas aeronaves de la Armada y del Cuerpo de Marines se estrellaran en el sur de California.
El sábado, en un comunicado, el Departamento de Asuntos Públicos de las Fuerzas Aéreas Navales de EE.UU. anunció una pausa de seguridad a partir del próximo lunes con el objetivo de revisar las prácticas de gestión de riesgos y realizar entrenamiento en procesos de gestión de amenazas y de errores.
La medida llega tras una serie de incidentes, algunos mortales, registrados durante los entrenamientos que ejecutan pilotos y marines en las últimas semanas en el desierto de la frontera entre California y Arizona.
El pasado 3 de junio, el piloto de un avión de combate de la Armada falleció al estrellarse su F/A-18E Super Hornet en el desierto de Mojave, en el sur de California. Cinco días después, un MV-22B Osprey de los Marines se estalló cerca de Glamis (California), muriendo las cinco personas que iban a bordo. El 9 de junio, un helicóptero Sikorsky MH-60S Seahawk de la Armada se estrelló cerca de la instalación aérea naval El Centro (California), nadie murió en este accidente.
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