La jueza del tribunal federal del Distrito de Columbia, Tanya Chutkan, ha condenado este viernes a Robert Scott Palmer a cinco años de prisión por irrumpir en el Capitolio, arrojar un extintor y una tabla de madera a la Policía durante el asalto. La sentencia más dura dictada hasta el momento en los múltiples procesos abiertos a partir del 6 de enero, cuando acaecieron los hechos.
“Debe quedar claro que tratar de detener la transición pacífica del poder, agredir a las fuerzas del orden público, será castigado”, ha alertado dicha jueza.
En este contexto, Chutkan ha rechazado la disculpa de Palmer escrita a mano en la que afirma que fue engañado por el expresidente estadounidense Donald Trump, a quien llama “tiránico”.
Palmer, de 54 años, fue identificado públicamente por primera vez por detectives en línea, quienes lo rastrearon a través de imágenes y vídeos, vestido con una chaqueta con los colores de bandera estadounidense y una gorra con la leyenda “Florida for Trump”.
Palmer es la primera persona en ser sentenciada por el delito de agredir a un agente con un arma peligrosa. Su sentencia de 63 meses podría establecer un punto de referencia para los más de 140 que enfrentan el mismo cargo.
Las anteriores condenas más severas por el ataque al Capitolio fueron de 41 meses contra dos hombres acusados de obstrucción de un procedimiento oficial, más no por agredir a las fuerzas de la seguridad.
El pasado 6 de enero, se produjo un asalto al edificio del Capitolio por un grupo de manifestantes, que arengados por Trump, con un discurso repetitivo de denuncias de fraude electoral —ocurrido supuestamente durante el proceso de conteo de las elecciones del 3 de noviembre—, intentó impedir al Congreso ratificar al demócrata Joe Biden como el 46.º presidente de Estados Unidos. Un suceso que se saldó con cinco muertos y varios heridos.
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