En un reporte publicado este miércoles por el diario estadounidense USA Today se indica que “ahora Irán representa para el presidente norteamericano, Donald Trump, la primera crisis en tiempo real de su presidencia”.
El análisis realiza tal afirmación a raíz del ataque, la madrugada de este miércoles, en venganza de Irán por el martirio del teniente general Qasem Soleimani, comandante de la Fuerza Quds del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) de Irán, contra dos bases militares de EE.UU. en Irak: la base aérea Ain Al-Asad, ubicada en la provincia occidental de Al-Anbar, y una base en Erbil, capital del Kurdistán iraquí.
Asimismo, conforme a USA Today, Trump también parece haber abandonado uno de los aspectos más positivos de su enfoque en lo que a la política exterior se refiere, es decir, una reticencia a meterse en nuevos conflictos, imposibles de ganar, en el oeste de Asia.
“El asesinato de Soleimani aumentó, en gran medida, la influencia de Irán en Irak y redujo la influencia de Estados Unidos en este país árabe al nivel más bajo en una década y media”, revela el artículo.
La Administración de Trump, tras la ofensiva de represalia de Irán, ha enfrentado una de sus mayores crisis, dado que, de acuerdo con otros informes publicados esta misma jornada, tal medida por parte del país persa ha desafiado las amenazas del presidente estadounidense de golpear importantes sitios en suelo iraní en caso de que Irán vengara la muerte de su héroe.
La muerte del comandante del CGRI generó un consenso contra Washington, tanto en Irán como en varias partes del mundo. Las autoridades persas tildaron el ataque de un “acto de terrorismo internacional”.
En este sentido, el Líder de la Revolución Islámica de Irán, el ayatolá Seyed Ali Jamenei, ha enfatizado este miércoles, por su parte, que el ataque de Irán contra las bases militares de EE.UU. en Irak solo ha sido una mera bofetada y no la prometida venganza por el asesinato del prominente estratega iraní.
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