La revista estadoundiense Foreign Policy reveló que Washington llevó a cabo tales ofensivas, a pesar de haberse comprometido a no usar estas armas en los campos de batalla de Irak y Siria.
A finales de 2015, el Ejército estadounidense disparó miles de proyectiles de munición con uranio empobrecido durante dos incursiones de alto perfil contra los takfiríes. Este material tóxico puede causar cáncer y malformaciones congénitas.
El analista internacional Iñaki Gil de San Vicente aborda el tema en una entrevista con HispanTV desde San Sebastián (España).
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