Está previsto que dicha central piloto que se construirá en la ciudad de Meshkin Shahr en la provincia de Ardabil (noroeste) entre en funcionamiento en los próximos dos años, lo que situará a Irán en el club de las dos docenas de países con capacidad de generar la energía geotérmica, según informó el miércoles la cadena iraní PressTV.
El proyecto de 50 megavatios se ajusta con el intento de Irán para ampliar su combinación de energía limpia que está dominado por los combustibles fósiles. La energía geotérmica es más barata y más fiable que otras fuentes de energía renovables, como la energía térmica o hidráulica.
En las centrales geotérmicas, el calor del núcleo de la tierra se utiliza para producir vapor en el agua subterránea y se le aplica el vapor a un generador que produce electricidad.
Para la planta de energía geotérmica en Meshkin Shahr, se están perforando 11 pozos, de los cuales siete tienen acceso a las reservas subterráneas de agua, indicó el ministro de Energía de Irán, Hamid Chitchian.
Además de generar la electricidad, la energía geotérmica será utilizada para calefacción en los duros inviernos de la región, agregó.
La instalación se está construyendo a una altura de 3000 metros desde el nivel del mar, cerca de la montaña de Sabalan que es famosa por su agua mineral y que atrae cada año a millones de turistas hacia las aguas termales, que se cree tienen propiedades curativas.
Previamente, el viceministro iraní de Energía para la investigación y los asuntos de recursos humanos, Ali Akbar Mohayeri, reveló que el país persa no sólo es capaz de establecer centrales eléctricas nacionales, sino también dispone de potencial para construir plantas de energía en otros países del Oriente Medio.
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