El comandante de estos ejercicios conjuntos, el contralmirante Habibolá Sayari, ha anunciado que la fase operativa de los simulacros comenzará partir de la noche de este miércoles en un área desde la región sureña de Yask y el este del estrecho de Ormuz hasta el norte del océano Índico.
Las unidades de infantería, blindadas, de defensa aérea, fuerzas mecanizadas y navales y unidades de flotantes superficiales y subsuperficiales del Ejército de Irán participan en los ejercicios con el apoyo de los bombarderos estratégicos de la Fuerza Aérea y bajo el lema “autoconfianza, autoridad, seguridad sostenible”, con el fin de reforzar su preparación defensiva.
“El mensaje del gran ejercicio del Ejército de la República Islámica de Irán a los países de la región es un recordatorio de las capacidades existentes dentro de la zona, basadas en el principio de todos juntos para establecer la paz sin necesidad a los extranjeros, pues, de hecho, la historia ha demostrado que los países extrarregionales han sido actores beligerantes e inseguros y no han traído más que inseguridad, guerra y ocupación a la región de Asia occidental”, ha precisado el contralmirante Sayari.
Al respecto, ha subrayado la necesidad de la retirada de los países extrarregionales de la zona, especialmente Estados Unidos y el Reino Unido, para preservar la estabilidad en la región y el restablecer su paz y estabilidad.
El Ejército de Irán siempre fortalece sus capacidades de defensa y mejora el nivel de entrenamiento para defender la integridad territorial del país y sus intereses nacionales, y no escatima ningún esfuerzo para promover este objetivo.
Las Fuerzas Armadas de Irán repiten que no dejarán sin respuesta toda amenaza y aseguran que están “altamente preparadas” para hacer frente a cualquier agresión extranjera por mínima que sea.
No obstante, Teherán insiste en que su capacidad defensiva no constituye amenaza alguna para la región, pues su único objetivo es preservar la soberanía e integridad territorial de Irán.
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