“Cuatro grupos terroristas que traficaban armas al interior del país fueron desmantelados. Durante estas operaciones 15 personas fueron detenidas”, ha anunciado este martes el comandante de la Policía de Sistán y Baluchistán, el teniente general Mohammad Qanbari.
Ha añadido que, durante estas redadas, las fuerzas de seguridad iraníes incautaron más de 100 pistolas y fusiles de Kalashnikov y una cantidad significativa de cartuchos.
Los detenidos confesaron que pretendían trasladar estas armas al interior del país para usarlas en disturbios y sembrar inseguridad en el país persa.
Reina la seguridad en Irán
Después de la muerte de la joven iraní Mahsa Amini —el 16 de septiembre en un hospital de Teherán, tras su detención policial, algunas provincias de Irán, incluida Sistán y Baluchistán, habían sido escenario de disturbios y actos de vandalismo.
Pero tras un trabajo arduo y sabio tanto de las autoridades como las fuerzas de seguridad, el pueblo iraní neutralizó los complots de los enemigos y actualmente, la paz y la seguridad reina en las calles del país.
Teherán acusa a EE.UU., Israel y varios Estados europeos de incitar a los disturbios en el país y, advierte de que golpeará con manos de hierro a quienes pretendan atentar contra la seguridad y estabilidad de la nación iraní.
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