Como habían acordado previamente los dos países vecinos, la delegación del Norte y del Sur han realizado hoy viernes un desfile detrás de la bandera de la unificación coreana —silueta de la península coreana en color azul sobre fondo blanco— al inicio de los Juegos Olímpicos (JJ.OO.).
El acto se ha llevado a cabo bajo la mirada del presidente surcoreano, Moon Jae-in, y de Kim Yo-jong, hermana menor del líder norcoreano, Kim Jong-un, quien ha sido recibida por las autoridades surcoreanas nada más llegar al país vecino.
Kim Yo-jong es primera vicedirectora del Departamento de Propaganda y Agitación del Partido de los Trabajadores de Corea del Norte, que viaja a Corea del Sur en un momento en que ambos Estados experimentan duras tensiones por los programas de misiles y de armas nucleares de Pyongyang, que los defiende frente a las provocaciones de Washington y Seúl.
Poco antes del inicio de la ceremonia de apertura de los Juegos, el presidente surcoreano se saludó con la hermana del líder norcoreano, en otro punto álgido del acto.
Al subir a la tribuna, Moon Jae-in se acercó al lugar donde estaba la delegación norcoreana y estrechó la mano de Kim Yo-jong, mientras otros representantes de las dos delegaciones intercambiaban sonrisas.
Distintas autoridades internacionales han viajado a Corea del Sur para asistir a la ceremonia inaugural, que comenzó hoy viernes poco después de las 20H00 (hora local, 11H00 GMT) en Pyeongchang, donde se desarrollarán las competiciones hasta el 25 de febrero.
Durante dos semanas, más de 2900 deportistas competirán por 102 títulos correspondientes a siete deportes y 15 disciplinas. Estos juegos, bautizados como los ‘Juegos de la Paz’ por Corea del Sur, son la primera gran cita del deporte de 2018, antes del Mundial de Fútbol de Rusia entre junio y julio.
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