Las mujeres víctimas del conflicto armado colombiano se capacitan y documentan para enfrentar como deben reclamar los derechos que por ley le debe reparar este país.
Con este aprendizaje sobre sus derechos en el posconflicto generan un eco en todas sus comunidades y así comienzan a crear una política de paz en ellas.
Esta formación las conlleva a la necesidad de la reconciliación y por igual a crearse proyectos tanto de vida como productivos, pues aún tienen la esperanza de verse en las tierras de las cuales fueron desalojadas.
Las víctimas serían el eje central del acuerdo de paz, estas iniciativas para que las víctimas conozcan sus derechos en dicho acuerdo no son auspiciadas por el Gobierno nacional paradójicamente, solo la Unión Europea (UE) las está cobijando.
Álvaro Altamiranda, Bogotá
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