El sábado, las fuerzas israelíes bombardearon la torre Al-Yala, en Gaza, provocando el derrumbe del edificio donde se encontraban las oficinas de la agencia estadounidense The Associated Press (AP), así como de la cadena catarí Al Jazeera y otros medios.
El gremio chileno, en un comunicado, declara que el acto violento israelí ha vulnerado los derechos humanos y básicos para la sana actividad de los medios de comunicación y el libre trabajo de informar de los periodistas y comunicadores que trabajaban en este lugar.
La nota pone de relieve que los medios establecidos en Al-Yala intentaban informar sobre los últimos acontecimientos al mundo y no desarrollaban ningún papel militar.
Asimismo, ha cargado contra el régimen de Tel Aviv por perjudicar a los civiles, como los profesionales de la prensa y los medios de comunicación, que buscan dar a conocer cuál es la situación del pueblo Palestina.
Además, el Colegio de Periodistas de Chile expresa su preocupación por la posible continuación de esta guerra que está causando la muerte de muchos inocentes y ha exigido a la comunidad internacional, incluida la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la toma de medidas inmediatas para acabar con esta confrontación bélica.
Según alegan fuentes del régimen israelí, el edificio “contenía activos militares pertenecientes a la inteligencia militar” del Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS), con quienes los israelíes están enzarzados en un cruento enfrentamiento desde el pasado 10 de mayo.
Cabe mencionar que también en 2019, el Sindicato de Periodistas Palestino (SPP) documentó 760 violaciones de los derechos de periodistas palestinos, incluyendo más de 200 casos de asaltos físicos, mientras que, desde 1990, la Federación Internacional de Periodistas (FIP) ha registrado al menos 33 periodistas palestinos muertos.
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