Los miembros takfiríes de EIIL y sus creencias incorrectas no tienen nada que ver con la religión del Islam.
Al cierre de la IX Cumbre del organismo, de dos días de duración, celebrada en la isla malasia Lankawi, los ministros han calificado a la banda extremista de un "riesgo para la seguridad regional e internacional" y han insistido en su aniquilación.
El ministro malasio de Defensa, Hesham al-Din Husein, quien presidía la reunión, ha explicado a periodistas que los representantes de todos países miembros han expresado su alerta sobre la expansión de los grupos terroristas en el mundo entero.
Los titulares, ha apostillado Husein, han exigido conocer raíces y razones detrás del surgimiento del terrorismo y, en este contexto, han subrayado la importancia de entrenar al pueblo.
Por su parte, el ministro de Defensa de Singapur, Ng Eng Hen, ha recalcado que los miembros takfiríes de EIIL y sus creencias incorrectas no tienen nada que ver con la religión del Islam.
Daesh había anunciado anteriormente el establecimiento de un califato y nombró a su líder, Ibrahim al-Samarrai (Abu Bakr al-Bagdadi), como califa y “jefe de los musulmanes en todas las partes” del mundo.
Los grupos extremistas como el EIIL se reforzaron durante los últimos años con ayuda financiera de países como EE.UU., Turquía, Arabia Saudí y Catar; ya están operando crimínes de lesa humanida tanto en Irak como en Siria, donde buscan derrocar el Gobierno legítimo de este país árabe.
Cabe agregar que los países de Malasia, Brunéi, Camboya, Indonesia, Laos, Myanmar (Birmania), Filipinas, Singapur, Tailandia y Vietnam tuvieron participación en la última cumbre de la ASEAN.
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