Decenas de miles de israelíes, en su mayoría hombres judíos ortodoxos jóvenes, desfilaron el domingo por las calles del casco viejo de Al-Quds, mientras varios de ellos corearon lemas racistas como “muerte a los árabes”.
Este evento tuvo lugar mientras los palestinos consideran la denominada “marcha de banderas” como una provocación y la rechazan por significar el inicio de la ocupación de esta ciudad santa en 1967. El año pasado, un desfile similar contribuyó a desencadenar una guerra de 11 días entre Israel y las facciones palestinas de la Franja de Gaza.
Esta marcha se celebró en momentos en que se alzan las tensiones en los territorios ocupados palestinos. En los últimos meses, la policía israelí ha reprimido en varias ocasiones las marchas palestinas, empleando balas de goma y granadas de aturdimiento.
Como consecuencia de estos movimientos, muchas zonas de la Cisjordania ocupada han sido escenario de duros enfrentamientos entre los palestinos y las fuerzas usurpadoras de Israel. Los manifestantes palestinos han ondeado las banderas y pancartas palestinas en las principales calles de Tubas, Yenin y Tulkarm (en la ocupada Cisjordania), expresando así su rechazo a la provocativa ‘marcha de las banderas’.
La represión israelí dejó el domingo al menos 219 civiles heridos en medio de choques con palestinos a raíz de la ‘marcha de las banderas’ en Nablus, Cisjordania.
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