“Las fuerzas yemeníes seguirán desarrollando sus armas y aumentarán el alcance de sus drones y misiles, de manera que harán sorprender al enemigo saudí”, ha afirmado este lunes el mayor general Yalal al-Rewishan, viceprimer ministro de Defensa y Seguridad del Gobierno de Salvación Nacional de Yemen.
Al-Rewishan, en referencia a los ataques llevados a cabo el domingo por las tropas yemeníes contra blancos saudíes, ha afirmado que los drones y misiles yemeníes golpearon “las bases e infraestructuras militares del enemigo saudí”.
Estos ataques, prosigue el militar yemení, han dejado daños materiales y humanos en las filas de las tropas de la coalición saudí. Entre las víctimas se encuentran varios expertos y comandantes, ha indicado.
Por su parte, otra fuente del Ministerio de Defensa de Yemen ha asegurado en la misma jornada del lunes que “el objetivo de las fuerzas armadas de Yemen de lanzar ataques contra el territorio saudí es detener su agresión y levantar el asedio contra el pueblo yemení”.
Los ataques yemeníes del domingo se produjeron un día después de que bombardeos de Arabia Saudí y sus aliados provocaran la muerte de 10 civiles yemeníes.
El Ejército yemení, que cuenta con el respaldo de los combatientes del movimiento popular Ansarolá, ha amenazado con aumentar sus ataques de represalia contra Arabia Saudí por la mascare de civiles, bajo la advertencia de que sus misiles pueden alcanzar “objetivos estratégicos” en Arabia Saudí y en los Emiratos Árabes Unidos (EAU).
Los ataques saudíes y de sus aliados, además de dejar más de 100 000 muertes, han provocado que unos 10 millones de yemeníes estén al borde de la hambruna, según el Programa Mundial de Alimentos (PMA), una instancia de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
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