• Misil balístico Qaher-1 de fabricación yemení.
Publicada: domingo, 19 de junio de 2016 5:04
Actualizada: domingo, 19 de junio de 2016 10:15

El Ejército de Yemen lanzó el sábado un misil balístico contra un campamento de las fuerzas apoyadas por Arabia Saudí cerca de la frontera saudí-yemení.

Según afirmó una fuente del Ejército y de los comités populares yemeníes a la agencia oficial de noticias SABA, el ataque tuvo como blanco una concentración de “mercenarios saudíes” en la localidad de Al-Hazm, ubicada en el sur de la provincia fronteriza y norteña de Al-Jawf.

El misil alcanzó con alta precisión su objetivo y causó grandes pérdidas humanas y materiales” en las filas de fuerzas enemigas, detalló la fuente.

El misil alcanzó con alta precisión su objetivo y causó grandes pérdidas humanas y materiales” en las filas de fuerzas enemigas, detalló luna fuente militar yemení

Por otro lado, el medio local informó de que las fuerzas yemeníes frustraron un ataque lanzado por “mercenarios saudíes” contra la región de Wadi al-Waqz en la referida provincia, matando e hiriendo a un número indeterminado de atacantes.

Estos enfrentamientos ocurrieron el mismo día en que el movimiento popular yemení, Ansarolá y las fuerzas afines al expresidente fugitivo yemení Abdu Rabu Mansur Hadi canjearon 194 prisioneros en la ciudad meridional de Taiz.

Los milicianos leales a Mansur Hadi entregaron a 118 miembros de Ansarolá a cambio de 76 de sus compañeros que habían caído en las manos de este movimiento.

Este canje de prisioneros, que es el mayor que ambos beligerantes efectuaron hasta el momento, no está vinculado con las negociaciones de paz que se desarrollan en Kuwait bajo el auspicio de las Naciones Unidas.

Yemen afronta una cruenta guerra desde que Arabia Saudí comenzara una agresión en marzo de 2015 a fin de restaurar en el poder Mansur Hadi, un estrecho aliado de Riad.

Según las últimas estadísticas de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la guerra saudí contra Yemen ya ha dejado, entre muertos y heridos, más de 32.000 víctimas, en su mayoría civiles.

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