“Hacemos un llamamiento a nuestros socios estadounidenses para que detengan las actividades peligrosas y no profesionales, y cumplan escrupulosamente el derecho internacional para evitar este tipo de situaciones en el futuro”, ha señalado este jueves el Ministerio ruso de Defensa.
El martes, la Defensa rusa informó de la aproximación peligrosa del destructor estadounidense USS Gravely a un buque patrullero ruso en la parte oriental del mar Mediterráneo, en un movimiento que, a su juicio, “violó las reglas internacionales y bilaterales de prevención de choques de naves”.
Hacemos un llamamiento a nuestros socios estadounidenses para que detengan las actividades peligrosas y no profesionales, y que cumplan escrupulosamente el derecho internacional para evitar este tipo de situaciones en el futuro”, de acuerdo con el Ministerio ruso de Defensa.
En respuesta, los funcionarios del Pentágono indicaron que el incidente se produjo debido a que el patrullero ruso Yaroslav Mudri cambió su rumbo y su velocidad y se acercó al destructor estadounidenses haciendo una maniobra peligrosa.
Ante esta situación, la instancia gubernamental rusa ha asegurado que Washington intenta encubrir las acciones poca profesionales de la tripulación del buque de guerra USS Gravely y echar la culpa a los marines rusos.
“Todas las declaraciones acerca de los intentos de la Yaroslav Mudri de obstaculizar el funcionamiento del destructor estadounidense no son profesionales. La fragata rusa estaba a una distancia adecuada y sus acciones no podrían afectar las maniobras de la contraparte”, ha destacado el Ministerio.
En un comunicado citado por la agencia local TASS, la Cartera rusa también ha rechazado las afirmaciones de las autoridades norteamericanas sobre que el buque de guerra ruso representa una amenaza para el portaaviones USS Harry S. Truman.
Moscú acusa a EE.UU. de querer ostentar su fuerza bélica de cara a la próxima cumbre de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
Anteriormente, el presidente ruso, Vladimir Putin, había declarado que la retórica agresiva de la OTAN obliga a Rusia a tomar medidas de respuesta, incluido el incremento de la capacidad defensiva.
mpv/ncl/nal
