Mediante un comunicado publicado este domingo, la Organización de Hach y Peregrinación de Irán ha explicado que a pesar de los esfuerzos de la delegación iraní para mantener conversaciones con responsables de Riad y resolver el problema del envío de peregrinos iraníes al Hach, las autoridades saudíes, por motivos políticos, no ofrecieron su debida colaboración.
“Ahora, por la falta de tiempo para poder organizar los preparativos necesarios y por el rechazo de las demandas legítimas de la República Islámica, se anuncia que los estimados peregrinos iraníes, debido a los continuados sabotajes de los saudíes no pueden asistir este año a los rituales del Hach y su responsabilidad cae en el Gobierno de Arabia Saudí”, reza la misiva.
Ahora, por la falta de tiempo para poder organizar los preparativos necesarios y por el rechazo de las demandas legítimas de la República Islámica, se anuncia que los estimados peregrinos iraníes, debido a los continuados sabotajes de los saudíes no pueden asistir este año a los rituales del Hach y su responsabilidad cae en el Gobierno de Arabia Saudí”, reza la misiva de la Organización de Hach y Peregrinación de Irán.
De esta forma, ha resaltado la visión infranacional que mantiene Irán hacia estos rituales para reforzar la unidad islámica e impedir las divergencias sectarias y tribales, y arremete contra la parte saudí por vincular la cuestión del Hach a los temas políticos y cambiar el texto del acuerdo que tenía desde hace años con el país persa para celebrar los rituales.
La monarquía saudí rechazó garantizar la seguridad y protección de los peregrinos iraníes, una demanda en que insiste Irán para evitar la repetición de los incidentes de la estampida mortal ocurrida en septiembre de 2015 en Mina, una localidad cercana a La Meca (Arabia Saudí), durante el Hach, la cual causó la muerte de miles de peregrinos, incluidos más de 460 iraníes.
Teherán había dado un plazo hasta este domingo a Riad para que acepte preservar la dignidad de los peregrinos iraníes.
Irán y el país árabe, que viven momentos muy tensos tras la ruptura de sus relaciones diplomáticas, anunciada por el régimen saudí a principios del año en curso, han mantenido múltiples negociaciones en los últimos meses para facilitar el envío de peregrinos iraníes al Hach.
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