Esto es Mosul. En el norte de Irak las fuerzas iraquíes lograron liberarla tras meses de lucha con los terroristas. Pero lo que ahora queda de la ciudad son puras ruinas.
Durante la guerra, los casi 2 millones de habitantes de la ciudad, experimentaron enormes sufrimientos. Miles de personas perdieron la vida, cerca de un millón se desplazaron y ahora afrontan un nuevo reto. Pero la tarea no es tan fácil. La infraestructura básica de la ciudad ha sido duramente golpeada, con seis distritos occidentales casi completamente destruidos.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) estimó que las reparaciones iniciales costarán más de mil millones de dólares. Explicó que en algunas zonas, ningún edificio parece haber escapado a los daños.
Las autoridades iraquíes dicen que tres cuartos de las carreteras de Mosul, casi todos los puentes, y un 65 % de su red eléctrica, han sido destruidos. Añaden que la mayor parte de la infraestructura de agua también ha quedado destrozada por los terroristas.
Aunque duró 3 años para que la segunda ciudad más grande del país quedara libre de los terroristas, sin duda alguna tardará mucho más reactivarla. Cuanto más tiempo se retrase la reconstrucción, más difícil y costoso será el proyecto. Esto tendría serios impactos en el destino de los habitantes de la ciudad, en la economía y en la futura estabilidad de Irak.
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