El atentado se cometió haciendo detonar en una gasolinera de la ciudad de Hilá, unos 100 kilómetros al sur de Bagdad (capital iraquí), cargas explosivas colocadas en una camioneta, según los datos proporcionados por fuentes de la seguridad iraquí.
Los medios informativos de Irán han confirmado la muerte de 40 ciudadanos iraníes en el atentado.
A esa hora, había en la gasolinera al menos siete autobuses con peregrinos (a bordo)”, ha indicado un agente de policía iraquí a la agencia francesa de noticias AFP.
En el lugar había varios autobuses llenos de peregrinos que volvían de la ciudad de Karbala, donde habían participado en las ceremonias de Arbaín, que marcan la culminación de un período de cuarenta días de luto tras el aniversario del martirio del Imam Husein (la paz sea con él).
“A esa hora, había en la gasolinera al menos siete autobuses con peregrinos (a bordo)”, ha indicado un agente de policía iraquí a la agencia francesa de noticias AFP.
En los autobuses viajaban peregrinos de Irán, Irak y Baréin, según ha indicado a la misma agencia una fuente de la Inteligencia iraquí, que ha añadido que las ambulancias y los cuerpos del orden público han sido enviados a la zona del incidente para las tareas de socorro.
Según las autoridades iraquíes, unos tres millones iraníes han viajado a Irak para Arbaín. La mayoría de ellos se queda habitualmente unos días más para visitar la ciudad de Karbala.
Las Unidades de Movilización Popular (PMU, por sus siglas en inglés, conocidas en árabe como Al-Hashd al-Shabi), habían confirmado que EIIL (Daesh), desesperado por los avances de las fuerzas populares iraquíes hacia los territorios que controla, en concreto Mosul, ha intensificado los ataques suicidas que realiza con vehículos cargados de explosivos.
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