“Todos los representantes de los Estados miembros han recalcado que en América Latina sopla un viento nuevo”, ha desvelado el ministro de Comercio de Luxemburgo, Jean Asselborn, en alusión a la reunión de este viernes de sus homólogos en Bruselas, capital belga.
Veremos si el Gobierno argentino está listo para hacer concesiones y mejorar la oferta”, ha señalado Matthias Machnig, el secretario de Estado alemán para asuntos económicos.
En una conferencia de prensa, Asselborn ha hecho público que la mayoría de los miembros de la UE están de acuerdo con un intercambio de ofertas, pero algunos consideran insuficiente la oferta del Mercado Común del Sur (Mercosur), que ha propuesto una apertura del 87 % de su mercado, una tasa inferior en un 4,5 % lo que busca el bloque europeo, es decir, un 91,5 % de apertura.
Según otras fuentes europeas, Francia no está de acuerdo con la reanudación de las negociaciones, mientras que Polonia, Irlanda y Hungría dudan de la suficiencia de la oferta del organismo suramericano.
“Veremos si el Gobierno argentino está listo para hacer concesiones y mejorar la oferta”, ha señalado el secretario de Estado alemán para asuntos económicos, Matthias Machnig.
Algunos analistas internacionales creen que el nuevo presidente argentino supone una amenaza para las relaciones internacionales de Argentina, y adelantan que provocará fracciones en la unidad de los países de América Latina.
El conservador presidente de Argentina, que se impuso el domingo en el balotaje de las presidenciales, ha señalado que en la próxima Cumbre de Mercosur, que será el 21 de diciembre en Asunción (capital de Paraguay), solicitará que se aplique la cláusula democrática contra Venezuela por “persecución” a los opositores y a “la libertad de expresión”.
En esta línea, el ministro de Economía y Finanzas de Uruguay, Danilo Astori, consideró el miércoles que existen muy “pocas posibilidades” de que se pueda aplicar la Carta Democrática del Mercosur contra Venezuela, puesto que, en su opinión, en el país bolivariano no ha habido una “ruptura institucional”.
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