“Las siguientes entradas se han agregado a la lista de la OFAC: Rosneft Trading S.A., Didier Casimiro”, ha declarado este martes la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC, por sus siglas en inglés) del Departamento del Tesoro de EE.UU., en un comunicado hecho público en su portal web.
El secretario del Tesoro, Steven T. Mnuchin, ha indicado que la empresa suiza Rosneft Trading S.A. y el presidente de su Junta Directiva están sujetos a un régimen de sanciones por negociar “la venta y el transporte de petróleo venezolano”.
Además, el Departamento del Tesoro de EE.UU. ha dado 90 días de plazo para que las compañías suspendan los negocios que están realizando con esta firma rusa.
La OFAC “está emitiendo una licencia general a corto plazo que autoriza a los ciudadanos estadounidenses a participar solamente de algunas actividades de cierre para desmarcarse de cualquier negocio que involucre a Rosneft Trading”, ha expresado un alto funcionario a la prensa.
Los altos funcionarios del Gobierno de EE.UU. han acusado a Rosneft Trading de proporcionar la mayor parte de los recursos financieros del Gobierno venezolano al mantener relaciones comerciales con Caracas, y han advertido a otras corporaciones energéticas de la aplicación de medidas similares si colaboran con el Ejecutivo del presidente del país caribeño, Nicolás Maduro.
En 2019, Washington acusó a Rosneft y sus subsidiarias de suministrar petróleo venezolano a los mercados extranjeros.
El 5 de febrero, el asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Robert O’Brien, amenazó con que, si Rusia no dejaba de colaborar con Venezuela, EE.UU. iba a tomar pronto medidas contra la petrolera rusa Rosneft.
A partir de que Washington reconociera en enero de 2019 al líder opositor venezolano Juan Guaidó como presidente interino de Venezuela, el mandatario estadounidense, Donald Trump, ha impuesto sanciones contra distintas entidades vinculadas al Ejecutivo de Maduro, además de restringir el comercio de petróleo y oro venezolanos.
Por su parte, Rusia se opone abiertamente a las posturas de Washington en contra de Caracas, y ha rechazado en reiteradas ocasiones la demanda del país norteamericano de que deje de comerciar con la nación sudamericana y considera que dicha exigencia contraviene el derecho internacional.
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